Quizás no nos demos cuenta,
pero cada día
por bueno o malo que sea
millones de sentimientos atraviesan
nuestra persona,
eso tan puro
que nace de ti sin que te des cuenta.
Quizás no nos demos cuenta
que en muchas ocasiones
que en muchas ocasiones
entramos en una espiral
dando más importancia
a esas cosas que no nos
hacen sentir bien,
el miedo,
la culpa,
el rencor,
la rabia,
en lugar de potenciar los buenos
que indiscutiblemente harían
que los malos fueran mucho
mas pequeños o incluso se desvanecieran,
cualquier día por malo que sea tendrás instantes
de esperanza,
ilusión,
alegría,
gratitud,
amor...
Y tu puedes ser un gran amplificador,
tu decides cuales de tus sentimientos
ocupan tu mente por más tiempo,
a cuales decides dar importancia.
En ocasiones cuando
tras una mala época empieza a funcionar todo
te das cuenta que de pronto
las cosas comienzan a torcerse,
párate y analiza tus emociones,
¿estas amplificando las buenas?
¿O dejas que las malas
se adueñen de ti?
Los buenos sentimientos
siempre atraerán otros sentimientos buenos
y aunque no lo creas
lo mismo hacen los malos.
Tienes la responsabilidad de crear
tu felicidad,
pues eres la única persona
que puede hacerlo,
o te enfocas en lo que quieres
y lo consigues,
o por el contrario dejas
que tu subconsciente se enfoque
en lo que te atemoriza,o bloquea,
y sigues como estas...
-Es tiempo de crear sonrisas-
-Es tiempo de ser feliz-
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